Delseus

todo parecia normal, hasta que PUM! se tropezo con la peluca podrida de la tia de Osvaldo, que es el portero del edificio de Arenales y Juncal que todos los dias a las siete de la mañana se levanta a tomar un cafe con leche con el arbol de media sombra que esta en la esquina, mientras los riega con unos mates y le cuenta que, como todas sus mañanas, a la muñeca de la vecina de al lado se le trabo el boton que dice "hola" y estuvo durante mas de siete horas seguidas diciendo exactamente lo mismo a un volumen exacerbante.
Todo parecia normal, salvo porque a Mirta se le dio por comprarse un culote nuevo floreado y le puso un poco de rouge para que piense que ha tenido un poco de guerra ultimamente y, justamente, la lleven a eso. Dicen que todo lo que se genera es lo que uno crea.
Todo parecia normal, excepto que a Isidoro se le ocurrio que hoy no tenia que tirarle la misma moneda de todos los dias a la maquina expendedora de cafe porque ya estaba cansado de sentirse estafado por una maquina de cafe que ni siquiera le contesta las preguntas que le hace, entonces la tomo por desprevenida con una massa y la amaso a golpes hasta exprimirle la ultima gota de cafe y de dinero.
Era un dia normal pero de a poco se iba desbaratando y los perros del piso cinco no paraban de cagarse, uno atras del otro, una sucesio inescrupulosa de pedos con olor a la crema para las arrugas que usa Olga - su dueña -.
Ese dia a Juantia se le ocurrio que la mejor manera de aportar su semilla de arena para con la humanidad era llenar un balde con bombuchas, con un poco de pis y un poco de sal, y adentro ponerles un papelito que diga "k-pum!" e ir tocando timbre por timbre de todas y cada una de las personas que no le caian bien.
Era un dia comun y corriente claro, pero al verdulero de la esquina se le dio por cambiar para siempre se profesion y dar un cambio radical, y convertirse en travesti ya que, luego de pasar largas noches observando a los que se paraban en su esquina, descubrio que esa era su verdadera profesion: pidio turno en la peluqueria y en el mecanico para las siliconas.
Las manos de Carmen estaban llenas de semen de hacia siete años, la ultima vez que estuvo con Alberto, "el pompon de su llanura" - como le gustaba llamarle -. Desde aquella vez el quedo petrificado de ver semejante cosa actuando, y decidio iniciarse en el celibato. En cambio ella quedo inmolada por un rayo de centeno luminico hacia el y decidio nunca mas lavarse las manos. desde ese dia se baño con guantes y no deja que absolutamente nadie se las toque.
Todo parecia normal, salvo que estamos en el caos total y que, a menos que te ganes la nueva burbuja "upus-tupus" es casi imposible que la energia de la ciudad no se vea en constante cambio.
Todo parecia normal, excepto Buenos Aires.